Un Congreso que legisla en contra de las mujeres

Pocos días duró la celebración entre las mujeres de la salida del General Sanabria de la dirección de la policía, luego de diferentes manifestaciones machistas y homofóbicas, incluso de declaraciones desinformativas sobre el uso del condón el cual él considera abortivo cuando no lo es. Y es que las declaraciones y actuaciones de Sanabria no existen en el vacío, sino en una sociedad donde la explotación y la opresión, alcanzan niveles nunca vistos, y donde la deshumanización de las mujeres es el pan de cada día. Reiteramos, el discurso machista y homofóbico sí daña, es la ideología sobre la cual se asientan los demás tipos de violencia incluidos los feminicidios.

PND sin Derechos Sexuales y Reproductivos

La discusión del Plan Nacional  de Desarrollo en el Congreso, prendió las alarmas de diversas organizaciones de mujeres y defensoras de derechos humanos, la razón es que la agenda antiderechos encabezada por congresistas de la bancada de oposición, pero también de muchos supuestamente de la coalición de Gobierno, durante la discusión  hicieron esfuerzos por tumbar el artículo 304 en el cual se determinaba la política pública de Derechos Sexuales y Reproductivos DSR.

Es de anotar que los DSR son parte de los derechos humanos, y habían sido previamente reconocidos por la legislación burguesa colombiana desde hace dos décadas, en el año 2003  se aprobó la «Política nacional de salud sexual y reproductiva”. Actualmente, existe una cruzada antiderechos intentando generar un retroceso, con discursos de odio y estigmatizantes hacia las mujeres.

En la comisión conjunta,  la Representante del Partido Liberal Karina Espinosa (Dpto. de Sucre) proyectó un video sensacionalista sobre el aborto, desconociendo lo dispuesto por la Corte Constitucional. Finalmente en la comisión, “acordaron” salvar el artículo pero retirando la palabra “reproductivos”, con una intencionalidad clara en contra del derecho al aborto, pero que puede afectar también el tema de anticoncepción, información, etc. El goce de los DSR debe ser integral, no es posible ejercer una sexualidad libre sin autonomía reproductiva. En la plenaria finalmente el artículo se elimina del PND, en un claro retroceso en materia de derechos.

Pero este no es el único actuar preocupante del actual Congreso en contra de las mujeres. Recientemente se cayó en plenaria, una iniciativa para garantizar la educación sexual integral. Con sus tradicionales Fake News, parlamentarios del ala reaccionaria de la burguesía difundieron temor en la población, confundiendo enseñar durante la infancia y adolescencia contenidos apropiados a cada edad, relacionados con autocuidado y sexualidad sana, con promover las relaciones sexuales, o la homosexualidad entre los menores. Lamentablemente, el Proyecto se hunde con la ayuda de congresistas del Pacto Histórico que se retiran de la plenaria antes de la votación.

Mujeres como incubadoras

Actualmente también, cursan otras iniciativas que son muy preocupantes como por ejemplo el proyecto de ley sobre maternidad subrogada, es decir, permitiendo el alquiler de vientres en Colombia. Este proyecto, además de legalizar el uso de los cuerpos de las mujeres más pobres por parte de las más favorecidas, inclusive extranjeras, contiene un artículo en el cual la mujer embarazada ya no puede retractarse del acuerdo ni revocar su consentimiento, es decir, no tendría derecho a interrumpir la gestación que ocurre en su cuerpo. La maternidad subrogada, excepto cuando se hace entre personas cercanas y por razones altruistas, es una de las más crueles formas de mercantilización y comercialización del cuerpo de las mujeres, las cuales al estar en una situación económica precaria acceden a gestar el hijo de otra, entregar a quien ha gestado en su vientre por una suma de dinero que varía de país a país.

Con contenido similar, cursa el proyecto de ley de “adopción desde el vientre materno”, que busca supuestamente otorgar a las mujeres con embarazos no deseados diferentes opciones; pero que sin embargo ha generado también la alarma de diferentes organizaciones de mujeres. Este proyecto es problemático en principio porque la adopción está contemplada para restablecer los derechos de menores de edad, es decir personas, equivaldría a otorgar al feto estatus de persona. Igualmente, se proponen mecanismos de consejería obligatoria que actuaría como una práctica disuasoria para las mujeres que solicitan IVE, y además propone que los profesionales de la salud informen al ICBF un listado de las mujeres con embarazos no deseados, en una clara violación de la privacidad y el secreto profesional. El objetivo final es, crear nuevas barreras al recién conquistado derecho al aborto, promoviendo estas otras supuestas opciones, que desconocen el impacto del embarazo no deseado sobre el cuerpo y la vida de la mujer o persona gestante, incluso si el producto es dado en adopción. Este y el anterior proyecto mencionado, comparten la visión de la mujer como objeto o máquina de la reproducción, una incubadora viva.

Ninguna confianza en el Congreso, luchar en las calles por nuestros derechos

Este Congreso misógino, donde hasta los supuestos aliados en cualquier momento dan la espalda a los derechos de las mujeres, y los DSR de toda la población, no puede tener nuestra confianza. Nos han llamado a dejar las calles y confiar en el camino de los proyectos de ley para lograr los cambios que el país necesita, pero estos ejemplos muestran que no será así. No es allí donde conquistaremos derechos y echaremos para abajo las cadenas que nos atan. Debemos recuperar el camino de la lucha, defender los derechos conquistados e impedir nuevos retrocesos en materia de salud sexual y reproductiva. Si bien mientras exista el capitalismo no seremos totalmente libres, la historia demuestra que luchando podemos obtener conquistas, pero que si dejamos de hacerlo esas conquistas son y serán arrancadas. Por eso nuestra lucha, no para en la lucha por derechos democráticos, sino que va más allá, hasta la conquista de un gobierno obrero y popular que elimine las bases de la explotación social y de la opresión.

Lucía

 

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