Con la huelga se puede derrotar la tercerización

Los trabajadores de Indupalma se animaron a organizarse sindicalmente fundando la Unión General de Trabajadores Tercerizados de la Agroindustria (UGTTA) en 2016, recogiendo el ejemplo de los trabajadores de la empresa Palmas del Cesar que libraron una dura lucha con una huelga en 2011 y otra en 2015, derrotando la tercerización laboral y logrando la contratación directa.

En 2011 Palmas del Cesar tenía 364 trabajadores, con contrato a término indefinido solo 138 y sindicalizados 107. En esas condiciones sostuvieron una huelga de 62 días. La huelga se levantó con la firma de una convención colectiva que incluía contratar gradualmente, con contrato a término indefinido a 20 trabajadores que tenían una vinculación a término fijo.

En 2015 los trabajadores de Palmas del Cesar eran más de 600 y había unos 250 tercerizados. Estando afiliados al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Industria Agropecuaria (Sintrainagro) seccional La Mina, presentaron pliego de peticiones, pero no se logró un acuerdo y fueron a la huelga. El problema de la tercerización no se había resuelto con la huelga de 2011. La empresa había sido obligada a dejar de contratar a través de cooperativas de trabajo asociado, pero utilizó la maniobra de reemplazarlas por el contrato sindical a través Induagro, modalidad que cuenta con la participación de la corrupta dirigencia sindical y es aplicada en varias empresas.

Después de 84 días de huelga, más de los 60 días que permite la ley, la empresa se vio obligada a firmar una convención que incluía la vinculación laboral directa con contrato a término indefino de 135 trabajadores y 90 con contrato a término fijo. Con ello se derrotaba la tercerización laboral. Esta lucha de los trabajadores de Palmas del Cesar fue la que inspiró a los trabajadores de Indupalma a ir a la huelga.