Un sindicato para la lucha y una dirección consecuente

Por Unidad Docente

Presentamos ante las bases del sector educativo esta lista de luchadores: Docentes decretos 2277 y 1278, provisionales y funcionarios administrativos temporales, en la perspectiva de lucha común por la unificación de los derechos laborales.

Ante la profunda crisis del sistema capitalista se hace necesario dotar a la clase trabajadora de herramientas para enfrentar la pretensión constante de patronos y gobiernos, de descargar la crisis sobre nuestros hombros.

La pandemia develó todas las falencias sociales y la verdadera cara de los capitalistas. Los gobiernos usaron la pandemia para favorecer a los grandes empresarios y a los banqueros, mientras millones de personas murieron.

El sector educativo resintió fuertemente el confinamiento, primero ante la ausencia estatal con recursos para atender la educación remota y luego enfrentando en la presencialidad, las consecuencias de la profundización de la crisis social, el desempleo, la carestía, y los efectos socioemocionales en los estudiantes. El gobierno pretende que la crisis educativa sea resuelta por los trabajadores de la educación mientras que año a año disminuyen la asignación presupuestal, se condiciona el nombramiento de maestros, funcionarios administrativos y profesionales afines, al número de estudiantes matriculado y a la disponibilidad fiscal.

Hoy el drama que se vive en las escuelas sumado a la infraestructura deficiente es el incremento de conflictos entre estudiantes y sus familias, el aumento de consumo y venta de psicoactivos, la violencia sexual y de género y en general en los actos delincuenciales en el entorno.

Elegido el próximo presidente y anunciado su gabinete, se configura un gobierno de conciliación de clases, ante lo cual se hace imperioso fortalecer la organización sindical.

Emergencia social educativa

Es urgente exigir la declaratoria de emergencia para que se destinen recursos para la remodelación y construcción de colegios, así como brindar alimentación de calidad a los estudiantes. En el mismo sentido constituir equipos interdisciplinarios con psicólogos, psiquiatras, trabajadores sociales, médicos, terapeutas entre otros, que atiendan de manera sistemática y coherente las situaciones conflictivas que hoy viven los estudiantes y sus familias. Además, incrementar el número de profesionales que atiendan las necesidades educativas especiales hoy contempladas en la política de inclusión.

Se hace indispensable el nombramiento en propiedad de los maestros provisionales y de los funcionarios administrativos temporales para lograr equipos estables de trabajo en los colegios.

Sindicalización y movilización

Los propósitos planteados requieren de una organización sindical clasista que  crea en las bases, recupere la capacidad de lucha del magisterio, promueva la organización y sindicalización de todos los trabajadores de la educación,  e impulse la movilización como instrumento de lucha contra el régimen y las políticas lesivas de los gobiernos .

Está demostrado que la conciliación de clases y la concertación, favorecen a los patronos, sus gobiernos y su política. Por ello debemos recuperar las asambleas de base para discutir el plan de acción y los objetivos de lucha. Gobierne quien gobierne, las reivindicaciones se conquistarán con la continuidad del paro nacional desarrollado por la base.

Por una dirección consecuente

Las luchas de los trabajadores dependen su definición y voluntad, pero para que triunfen deben contar con una dirección independiente del patrón, del gobierno y de los partidos de la burguesía. Una dirección clasista, consecuente y revolucionaria, que no haga acuerdos sobre sus afiliados, sin contar con ellos, sino que negocie contando con la decisión de la base. No se puede repetir lo ocurrido durante el estallido social del 28A, en el cual la dirección mayoritaria del magisterio abandonó las asambleas de base y condujo al desgaste de la lucha, para luego echarle la culpa a las bases y así justificar el traslado de la lucha callejera hacia las urnas.

Por democracia sindical

Se debe aplicar la más amplia democracia para facilitar la toma de decisiones. En tanto el poder lo tengan las bases y la máxima dirección sea la asamblea general de afiliados, se evita que derechos sindicales se vuelvan privilegios. Si el sindicato es para la lucha, los dineros que aportan los afiliados serán para organizar las luchas y no para beneficio individual de los dirigentes. El permiso sindical permanente es para ayudar a organizar las bases, recoger el sentir y las dificultades de cada afiliado. Es sano y necesario que el dirigente vuelva al aula de clase, para tener contacto directo con la realidad vivida en los colegios.

Hay que reducir los auxilios a los directivos y condicionarlos a los planes de trabajo y a la austeridad con la que vive un trabajador con salario mínimo. Debemos modificar la definición estatutaria de entregar a los dirigentes 5 salarios mínimos, que se han convertido en un sobresueldo de uso personal.

Por un sindicalismo sin machismo

La organización debe tomar medidas para garantizar la participación de las maestras y administrativas en la actividad sindical. En el sector educativo, la mayoría son mujeres que tienen limitaciones generadas por los roles asignados por la sociedad en cuanto a labores domésticas y de cuidado, por lo que hay que contribuir para que al menos el cuidado de los hijos sea brindado por el sindicato, en tanto que a través de la formación política se avanza en la conciencia sobre el manejo doméstico equitativo.

Así mismo, los estatutos del sindicato deben dotarse de medidas de favorecimiento democrático a la mujer y medidas contra el machismo, y en los pliegos de negociación, incluir exigencias al gobierno relacionadas con derechos femeninos, maternos y de género, que rompan con los roles sexistas.

Contra el régimen autoritario

Alto a la criminalización de la protesta social. Permanente denuncia y movilización ante el asesinato de luchadores sociales. Libertad inmediata para los presos por luchar. Defendamos el derecho de huelga.

Contra el hambre, el desempleo y la privatización

Debemos exigir aumento del salario mínimo de acuerdo con el costo de la canasta y congelamiento de precios, trabajo para todos con estabilidad, salud y educación bajo la responsabilidad directa del Estado, defensa de las conquistas del magisterio.

En las ELECCIONES ADE: 25 de agosto de 2022

Asamblea de delegados: FREDDY RUIZ AYALA # 364

Junta Directiva: apoyamos a ROMAREY GIL # 7