Homofóbicos y machistas al Pacto Histórico ¿Todo Vale?

Por : Ivonne

Se ha producido un gran revuelo en redes sociales a propósito de la alianza de Petro con el líder cristiano Alfredo Saaed, y es que no es para menos. Sorprende y preocupa la entrada al Pacto Histórico de este personaje que anteriormente se ha manifestado en contra de los derechos de las personas LGBTI y de las mujeres, incluso llegando a comparar a las personas homosexuales con ladrones y delincuentes.

No estamos en contra de los cristianos, ni de su participación en política como personas, pero sí creemos en un estado laico donde las creencias religiosas no se usen como obstrucción a derechos. También sabemos que existen cristianos de izquierda y con ideas progresivas que no están contra el aborto ni contra los homosexuales, pero en este caso no se trata de un cristiano “progre”, ni de un predicador de la teología de la liberación. Se trata de uno de esos empresarios de la fe.

De manera clara afirmaba “No matrimonio igualitario. No legalización marihuana. No aborto. Sí familia. Sí a la vida”, en un reportaje de La Silla Vacía.  Previamente ha sido candidato por Cambio Radical, y ha tenido coqueteos y ha pedido el aval de Colombia Justa Libres y hasta del Centro Democrático. También hizo público su apoyo a la caída ministra Abudinen.  De tal suerte que ahora sus repentinos virajes a la izquierda, no solo no convencen sino que preocupan a miles de mujeres y personas LGBTI que tienen expectativas en que el Pacto Histórico sea un pacto de los trabajadores, los pobres y los oprimidos, por un país supuestamente diferente donde los derechos de todas, todos y todes sean respetados – mínimamente- .

El Vale todo

Ya en el pasado, Petro había logrado confundir a sus seguidores y decepcionar a unos cuantos, cuando apoyó la elección de Alejandro Ordoñez a la procuraduría, cosa de la cual luego se arrepintió, pero que demuestra que a la hora de hacer cálculos políticos está dispuesto a sacrificar a las mujeres, los LGBTI y otros oprimidos.

El Pastor Saade promete recaudar más de 1 millón de votos adicionales que podrían ser decisivos en la contienda electoral. Pero nos preguntamos si vale la pena ganar, renunciando incluso a los más elementales puntos del programa, nos parece que ganar para gobernar con el programa de la derecha es igual o casi peor que perder. Ya nosotros sabíamos que el programa de Petro más que de izquierda o anticapitalista, no es más que un programa social liberal, pero al menos se esperaba que en materia de derechos democráticos fuera el más avanzado de los candidatos. No parece ser el caso, el todo es ganar como sea y a cualquier costo.

Lamentablemente el Pacto Histórico, y en especial el petrismo avanza y consolida su política de alianzas con sectores burgueses como Roy Barreras y Bennedetti entre otros, ahora no solo acepta apoyo de burgueses sino directamente del pensamiento de derechas. Además este tipo de campaña termina sirviendo de bombero para apagar las luchas, en tanto traslada los problemas sociales al terreno electoral.

La democracia en el Pacto y Colombia Humana

Por si fuera poco, los sorprendidos con esta noticia no fueron solo los internautas o los colombianos del común, sino también los demás lideres y organizaciones del pacto. Así lo hizo saber en redes Margarita Rosa de Francisco que ha sido una petrista convencida los últimos años, pero quien no quedó convencida con esta jugada. Y es que no es la primera crítica interna que se hace por la manera en que se definen tanto las alianzas como las listas, en las cuales prima el amiguismo y las decisiones unilaterales de Petro en lugar de la discusión y la decisión democráticas.

Un Antecedente que Preocupa

En 2011  Dilma Roussef fue elegida presidenta de Brasil con un discurso alternativo y de izquierda; para ganar hizo alianzas con sectores cristianos y vendió por algunos miles de votos, los derechos de los LGBTI y el derecho al aborto. De manera explicita se comprometió con ellos a no tomar medidas tendientes a la liberalización o despenalización del aborto en Brasil y lo cumplió, igualmente durante su gobierno se retiró del Plan Nacional de Educación la meta que trataba de la promoción de la igualdad racial, regional, de género y de orientación sexual, o cuando vetó el kit anti-homofobia en las escuelas, de tal manera que durante su Gobierno “alternativo y de izquierda” no hubo avances en cuanto a los derechos de las mujeres ni las personas LGBTI.

Por el momento el Pacto Histórico parece dejar más dudas que respuestas, al tiempo que se fortalece la alianza con sectores de la burguesía y de derechas, se va alejando la posibilidad de un pacto por abajo con los jóvenes, las mujeres, los LGBTI, los afro, los indígenas, los trabajadores y todos los que salimos a las calles durante el Paro Nacional porque estamos hartos de la miseria, la opresión y la discriminación.