Elecciones parlamentarias: primera vuelta presidencial

Las elecciones parlamentarias se convirtieron en la primera vuelta presidencial y redefinen un panorama político que si bien no presenta grandes cambios en la distribución de las distintas fuerzas, sí implican una nueva negociación con miras a un acuerdo en torno al nuevo gobierno. La división entre santistas y uribistas pareciera diluirse, así como la capacidad del reformismo de negociar con la Casa de Nariño.

Autor: Antonio Romero

Los resultados muestran el triunfo de la derecha en sus dos vertientes –santistas y uribistas– además de la consolidación de un centro que defiende las aspiraciones de la llamada clase media –Partido Verde– y el mantenimiento de una izquierda reformista con el Polo Democrático y Decentes.

Los partidos de la derecha en el Senado de la República suman 81 senadores, en el centro quedaría el Partido Verde con 10 curules y la llamada izquierda reformista con 5 del Polo Democrático, 4 de Decentes y 5 de la FARC. Por la Cámara de Representantes, los partidos de la derecha lograron 145 curules: Partido Liberal con 35, Centro Democrático con 32, Cambio Radical con 30, Partido de la U con 25, Partido Conservador con 21 y Mira con 2. En el centro, el Partido Verde tiene 9 representantes. Y en la izquierda, el Polo Democrático, Decentes y sus coaliciones suman 6, más los 5 de la FARC. Estos son los resultados con el 98.97% escrutado, pero en el reconteo puede haber cambios.

Lo que se espera de estos resultados es que los partidos más afines al establecimiento seguirán aplicando las reformas regresivas contra la clase trabajadora sin mayores dificultades y tendrán que negociar la implementación del acuerdo, según el resultado de las presidenciales, en especial en lo que concierne a la Jurisdicción Especial para la Paz, JEP.

La derecha en negociaciones…

El panorama a la derecha cambia poco, las maquinarias clientelistas regionales mantienen sus cuotas, salvo algunos reveses. Sin embargo, el esquema de Unidad Nacional contra Centro Democrático en los asuntos del acuerdo de paz puede cambiar. Ante un eventual triunfo del Centro Democrático en las presidenciales, es posible que las vertientes liberales –Partido de la U, Partido Liberal y Cambio Radical– se reunifiquen para negociar con la extrema derecha.

Estas maquinarias políticas tuvieron más de 10 millones de votos y 81 curules que les permiten controlar las iniciativas parlamentarias y aplicar los ajustes a favor de la burguesía. Lo importante es que este bloque se mantuvo dividido durante el gobierno de Santos y es posible que se reunifique en torno a unos acuerdos entre Germán Vargas Lleras e Iván Duque, únicos candidatos de este bloque que mantienen opciones presidenciales.

Partido Votos Curules
Centro Democrático 2.513.320 19
Cambio Radical 2.155.487 16
Partido Conservador 1.927.320 15
Partido Liberal 1.901.933 14
Partido de la U 1.853.054 14
Mira 501.489 3
Total 10.852.603 81

…y la ‘izquierda’ también

Debemos advertir que el Partido Verde se propone como una opción de centro, que puede hacer acuerdos con sectores del Polo Democrático pero también con sectores neoliberales en su llamada lucha contra la corrupción. Su mayor elector es Antanas Mockus y su candidato presidencial es Sergio Fajardo, pero a su interior existen sectores del movimiento progresista de Petro como Inti Asprilla, que tienen votaciones importantes.

En el Polo Democrático, Robledo y el empresario Pedro Londoño, su nuevo senador, tienen simpatías con la propuesta del Partido Verde, pero los demás senadores electos –Alexander López, Iván Cepeda y Alberto Castilla– son más cercanos a las posiciones de Petro. También estará en juego la participación parlamentaria de la FARC, hasta ahora tanto el Polo como Decentes han intentado mantenerse lejanos a la ex guerrilla para no afectar sus intereses electorales.

Para este sector del centro y la izquierda reformista, que durante el gobierno de Santos estuvieron en negociación permanente para hacerle ‘oposición’ al Centro Democrático, un eventual triunfo de Duque o Vargas Lleras los dejaría con poca capacidad de participación en el gobierno y tendrían que volver a su tradicional oposición parlamentaria.

Partido Votos Curules
Partido Verde 1.317.429 10
Polo Democrático 736.367 5
Decentes 523.286 4
FARC 52.532 5
Total 2.629.614 24

Polarización, negociación y movilización

El Polo Democrático logró mantener sus curules y en buena medida recogió parte de las luchas sociales del año pasado, Jorge Robledo logra más de 200 mil votos y aparece un empresario santandereano como segunda votación. Alexander López se vuelve la tercera fuerza electoral de este agrupamiento gracias al respaldo de sectores en conflicto como las madres comunitarias y el movimiento cívico de Buenaventura. La lista de los Decentes es encabezada por el petrista Gustavo Bolívar y elije a dos dirigentes del reformismo: Aída Avella y Gloria Flórez.

La FARC obtiene un poco más de 50 mil votos que le permiten tener las cinco curules a senado y cinco a la cámara que les otorga el acuerdo de paz y tendrán que negociar con el resto del reformismo, que hasta el momento ha preferido mantener sus distancias.
Pero todo parece indicar que el nuevo escenario de polarización política en las elecciones presidenciales, no le permitirá a este variopinto sector una negociación con los sectores más fuertes del establecimiento, ni con Vargas Lleras ni con Iván Duque, por lo que tendrán que limitarse a ejercer su oposición parlamentaria a través de debates de control político.

En el pasado gobierno, la oposición parlamentaria respaldó al gobierno bajo la premisa de apoyar el proceso de paz y la implementación de los acuerdos, en esta nueva legislatura intentarán convertir las luchas sociales en discusiones parlamentarias. En el futuro, el interrogante es si la movilización de la clase trabajadora y los sectores populares logra frenar los planes de la burguesía y superar la lógica del parlamentarismo reformista que no se pone al servicio de las luchas sino que se alimenta de ellas.

Comentarios cerrados