Sintrabiofilm lucha contra la tercerización y contra los mercaderes de la salud

¿Alguna vez has abierto un paquete de papitas o galletas? Tiene un sonido inconfundible. Es el empaque plástico de una película de polipropileno biorientado, producido por Biofilm, con plantas en la Cartagena y Tampico (México), empresa del grupo económico Valorem (Familia Santodomingo).

Autor: Daniel Polo, directivo de Sintrabiofilm

El 19 de marzo de 2012 clandestinamente, como se tienen que hacer todos los sindicatos independientes en Colombia, los trabajadores fundaron el Sindicato de Trabajadores de Biofilm (Sintrabiofilm). Desde entonces la empresa le declaró la guerra a los obreros que generan la riqueza. Los trabajadores libramos una fuerte batalla contra las políticas represivas de esta empresa que ha recurrido a todos los medios para acabar con el sindicato. Desde demandas de cancelación de junta directiva, despidos, sanciones, llamados a disciplinarios, estigmatización, persecución, discriminación y todo un sin número de prácticas para debilitar nuestra organización, lo que no ha conseguido gracias a la unidad de los trabajadores.

Desde 2010, la empresa empezó a aplicar un plan de despidos masivos cubriendo esos puestos con personal tercerizado, en contubernio con el Ministerio del Trabajo, que ha denunciado el sindicato exigiendo investigación. Hace un tiempo la empresa presentó un acuerdo de formalización «voluntario» solo para 13 de los más de 100 trabajadores que mantiene tercerizados con las temporales Asap, Aseco, Solmex del Caribe y Utkargo, pretendiendo con esta medida archivar una investigación. Ese acuerdo tramposo fue aprobado por la viceministra del Trabajo.

Recientemente, atendiendo una solicitud de control preferente, el Ministerio del Trabajo envió una comisión especial de inspectores, el 29 de agosto, sin notificar al Sindicato y reuniéndose solo con la empresa lo que confirma la complicidad de los funcionarios del Ministerio.

Junto al problema de la tercerización está el de salud. El 30% de los trabajadores padecen algún tipo de enfermedad, discapacidad o limitación física. La empresa pretendió aplicar una serie de reubicaciones a los trabajadores enfermos, miembros del sindicato, asignándoles funciones que riñen con sus restricciones médicas, en complicidad por omisión con la ARL Sura. Por una campaña de denuncia del sindicato se han visto obligados a respetar la ubicación laboral respetando las limitaciones físicas de cada trabajador. Sura pertenece al grupo que tiene el negocio de seguros de vida y seguridad social, pensiones, ahorro e inversión e incluye a Bancolombia. Tiene acciones en Nutresa y Argos. Que pueden esperar los trabajadores con estos mercaderes de la salud. Por eso, la próxima vez que abras un paquete de papitas o galletas, recuerda que hay un sindicato que lucha contra la explotación laboral en la empresa Biofilm.

 

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