Preparar, ya y por la base, el Paro Cívico Nacional

El Comando Nacional Unitario (CNU) y la Coordinación de Organizaciones Sociales (COS), concluyeron, el jueves primero de junio en reunión que agrupó a más de 100 representantes de organizaciones sindicales, sociales y políticas, que la situación… “amerita que iniciemos ya la preparación y desarrollo del Paro Cívico Nacional…”, como lo consignó en su Informativo N° 11.

Autor: Partido Socialista de los Trabajadores. Liga Internacional de los Trabajadores, Cuarta Internacional. Bogotá, junio 08 de 2017.

Santos dice que el gobierno no tiene plata. Con el argumento de la crisis económica, se niega a responder las apremiantes necesidades de los trabajadores y los pobres mientras sigue garantizando onerosos recursos para el pago de la fraudulenta deuda externa y para garantizar los privilegios para los altos funcionarios estatales y el presupuesto de las fuerzas represivas. Y lo poco que queda y que llega a las regiones es desangrado por la corrupción.

Pero su mejor carta para sortear y sofocar los conflictos ha sido mantenerlos fragmentados y aislados, sorteando cada uno de ellos con soluciones insuficientes que en gran medida quedan como promesas incumplidas. Para que haya podido tener éxito en desmontar los conflictos ha contado con un aliado. Las direcciones de las centrales sindicales y de los sindicatos con el mayor poder de convocatoria como Fecode, que han ayudado a mantener las luchas aisladas y descoordinadas, posponiendo semestre tras semestre la necesidad de la lucha unificada en una sola acción de envergadura nacional. Lamentablemente esa ha sido la política durante la presente coyuntura de conflictos, incluso en lo más álgido de la represión del Esmad y el ejército contra el paro de Buenaventura, la solidaridad más efectiva, la de la unidad de los conflictos nunca llegó.

La necesidad del paro cívico nacional lo exige la férrea resistencia del magisterio que mantiene el paro a pesar de las amenazas de represalias, de los asesinatos de tres maestros en medio del paro y de la propaganda mentirosa de los grandes medios de comunicación. Lo demuestra también el paro de 48 horas adelantado por los trabajadores de la rama judicial y la insatisfacción de los estatales con el arreglo salarial acordado con las direcciones de las centrales. Lo reclaman los movimientos cívicos que se preparan en Yopal, Tumaco, la Guajira, Barrancabermeja y los paros declarados por los transportadores y los controladores aéreos. Y lo necesitan con urgencia los trabajadores de Palmas Bucarelia en Puerto Wilches, los miles de trabajadores precarizados de Avianca, los obreros de la Cervecería del Valle, los de Homecenter- Sodimac, los mineros de Manaure en la Guajira y los trabajadores de Litoplast en Barranquilla, entre otros, que todos por igual enfrentan heroicamente y en forma aislada la intransigencia y la represión de sus patronos.

El reconocimiento de la necesidad del Paro Cívico Nacional hecho por el Comité Ejecutivo de Fecode, al igual que el Comando Nacional Unitario (CNU) y la Coordinación de Organizaciones Sociales, deben concretarse profundizando la coordinación y centralización de todas las luchas y facilitando los mecanismos democráticos que permitan a las bases de los luchadores definir sobre los objetivos, la dirección y los medios de lucha y movilización que consideren más adecuados para derrotar al gobierno. Carlos Rivas, presidente de Fecode ha anunciado que la federación liderará la organización del paro cívico. De acuerdo con ello proponemos que en cada escuela y colegio se constituya un comité de paro con toda la comunidad y la vecindad.

Se debe convocar un encuentro de amplia representación nacional que le ponga fecha, lo organice y defina el programa que recoja las reivindicaciones que unifiquen a todos los explotados y oprimidos del país. En ese evento —además del CNU y la COS— debemos hacer presencia masiva los sindicatos, las asociaciones gremiales, populares, juveniles, las organizaciones políticas y de las minorías sexuales y raciales que nos oponemos a este gobierno para garantizar el éxito del Paro Nacional. El PST le propone desde ya a ese encuentro que levante un programa de reivindicaciones similar al que exponemos en la página 12 de esta edición de El Socialista.

Proponemos que a cambio negociar por arriba se utilicen los métodos de discusión democrática en la base para tomar todas las decisiones que afecten la lucha, y que vote que privilegia la movilización masiva y directa como método central de lucha, tal como lo han hecho los maestros estatales, los pobladores del Chocó y Buenaventura, y los trabajadores de Brasil, Argentina, Paraguay y Venezuela para enfrentar los planes antiobreros y la represión oficial.

Finalmente, proponemos que, para evitar que sean los politiqueros burgueses y oportunistas de siempre los que capitalicen los resultados de la lucha, se incluya en el pliego la exigencia de garantías políticas —para todos los trabajadores y organizaciones— similares a las que se han reservado para los partidos de los explotadores y a las que les están concediendo a las organizaciones guerrilleras que se han desmovilizado. Porque para las próximas elecciones presidenciales y de corporaciones públicas los trabajadores debemos configurar listas con candidatos elegidos de entre los mejores luchadores obreros y populares y de entre quienes se destaquen en la preparación y realización del Paro Cívico Nacional, exigiendo condiciones que garanticen su participación.