Colombia ¿Por qué la crisis la deben pagar los ricos? Publicado por: Administrador el 18 junio, 2017 Más en Colombia: #21N: reivindicar el camino de la lucha y retomar los objetivos del estallido social 20 noviembre, 2024 Editorial: Inundados y con sed 15 noviembre, 2024 Ante la crisis fiscal, ¡NO al pago de la deuda externa! 6 noviembre, 2024 Este segundo trimestre del año sorpresivamente han explotado en el país paros de trabajadores del Ministerio de Trabajo, de maestros, de salud y justicia, a los que se suman paros cívicos en Buenaventura y Quibdó y otro menos sonado en Barrancabermeja, digo sorpresivamente porque pese a que las condiciones sociales, económicas y políticas son más que propicias, el país y muchos de sus dirigentes estaban embriagados con el tema de la paz. Autor: Manuela Las condiciones de vida de los trabajadores y pobladores de los municipios de Colombia vienen deteriorándose año tras año, sus problemas no se solucionaron cuando Colombia contaba con buenos recursos económicos, menos ahora que el país ha entrado en una supuesta crisis, gracias a la caída de los precios del petróleo y otras materias primas. Sabemos que los recursos por estos conceptos ocupan un renglón importante en las finanzas de la nación. Nuestro partido desde que se empezó a mencionar la palabra crisis, levantó la consigna “Que la crisis la paguen los ricos” y algunos se preguntaran ¿qué hay detrás de esta consigna? ¿Por qué los trabajadores no deben asumir la crisis? La razón la explican las cifras económicas que muestran como durante años de bonanza petrolera y minera, de crecimiento económico en general, la población pobre, los campesinos y los trabajadores no tuvieron participación de ella. El salario mínimo creció apenas ajustado a la inflación, por lo que es más correcto hablar de ajuste que de incremento, los trabajadores con más de un salario mínimo obtuvieron ajustes incluso por debajo de la inflación, lo que en buena medida explica por qué los paros actuales tienen en común la exigencia de aumento salarial. Los hospitales públicos prácticamente desaparecieron, los pocos que sobreviven no cuentan con recursos suficientes, la educación pública es insuficiente y ha perdido calidad, no hay colegios suficientes y a cada maestro se le impone una carga de 40 o 50 estudiantes. La tercerización se ha generalizado incluso en entidades del Estado, con lo que los patrones se liberaron de pagar prestaciones sociales, el desempleo en cifras ha disminuido, pero la realidad es que el trabajo informal crece exponencialmente. Que decir de los municipios, Buenaventura y Quibdó se levantan en paro cívico entre otros puntos exigiendo agua potable, la infraestructura de acueducto y alcantarillado prácticamente no existe, pese a que la Constitución establece que el estado está obligado a proveer a los pueblos de saneamiento básico. Lo triste es que esta misma realidad se vive en cada municipio de Colombia, incluso los más cercanos a la capital. La crisis está abajo, las ganancias arriba Para no mirar hacia atrás, donde todos sabemos que las ganancias fueron enormes y no se atendieron estos problemas, miremos las cifras de hoy (primer trimestre 2017) cuando la economía obtuvo un crecimiento de apenas 1.1% Sector empresarial: 16 grandes compañías tuvieron un crecimiento de 55.5%, en pesos aumentaron en 26 billones respecto a 2016, la mitad del total de las empresas vio aumentar sus utilidades, 25% permaneció igual y solo 25% las vieron reducidas. Ecopetrol reportó ganancias netas de $886.600 millones, 144% de incremento frente al primer trimestre de 2016. Argos que estuvo mal, aumento 10% sus ingresos, ISA tuvo un incremento de 24.7% y espera romper record de utilidades para el 2017 con una expectativa de incrementar a 94%, estos son sólo algunos ejemplos. A estas utilidades hay que sumarles que a partir de la reforma tributaria sus impuestos bajaran de 33% a 25%. Sector financiero: Para evidenciar la magnitud de las ganancias que obtiene este sector veamos, Bancolombia en 2016 obtuvo sólo por cobro de intereses ganancia de 9 billones, el mismo banco hasta mayo de este año, que ha sido malo, obtuvo ganancias de 1.3 billones, Banco de Bogotá 762.272 millones, Davivienda 620.344 millones, BBVA 258.233 millones. Pese a estas utilidades se habla de que hay crisis en el sector porque la cartera morosa ha crecido en este año alrededor del 26%. La cartera morosa obedece a que los hogares colombianos no dan más, están endeudados, sin incremento salarial y pagando IVA de 19% y tasas de interés de usura. El gobierno: La reducción de los precios del petróleo lo puso en aprietos, recordemos que Ecopetrol ha servido de caja menor al gobierno de turno, pero como vimos antes, los ingresos de esta empresa aumentaron en el primer trimestre de 2017, adicionalmente se está implementando la última reforma tributaria con la cual espera recaudar en el 2017 más de 7 billones de pesos y 26 billones después de 2022. Esta reforma tributaria carga todo el peso sobre los trabajadores, mientras redujo el impuesto a las empresas, desapareció el impuesto a la riqueza y el CREE (en 2012 se creó este impuesto que remplazaba los parafiscales que aportaban las empresas al ICBF, SENA y cajas de compensación), exoneró del pago de IVA a las compras de bienes de capital, incrementó el IVA a 19% de todos los bienes exceptuando muy pocos de la canasta familiar, generalizó el pago de impuestos a los trabajadores y ahora dice que no hay plata para incremento de salarios a trabajadores del estado, excepto para los congresistas. Es hora de que los capitalistas, banqueros, terratenientes y el gobierno paguen la crisis a través de aumentos salariales, trabajos de calidad y asumiendo el pago de las prestaciones sociales, reducción significativa de las tasas de interés, préstamos para los trabajadores y los campesinos a bajo costo (conforme a la tasa de inflación), eliminación del IVA y del 4 por mil, no al pago de la deuda externa mientras los municipios carecen de infraestructura, servicios públicos y salud, no más corrupción ni mermelada, no más represión para callar al pueblo. Post Views: 2.939