Declaraciones Ni por el SÍ de Santos, ni por el NO de Uribe: escriba Constituyente sobre el tarjetón Publicado por: Administrador el 8 septiembre, 2016 Más en Declaraciones: #21N: reivindicar el camino de la lucha y retomar los objetivos del estallido social 20 noviembre, 2024 Editorial: Inundados y con sed 15 noviembre, 2024 Editorial/ Pegasus: carta negociadora de Petro con el uribismo 31 octubre, 2024 El anuncio de Santos sobre las negociaciones de paz con las Farc, de que ya todo está acordado, marca el comienzo de la incorporación de las Farc al régimen político. Así los acuerdos firmados se convierten, en la práctica, en el nuevo programa de las Farc, y serán defendidos para que sean cumplidos. En buena medida también será el programa que defenderán los sectores de izquierda que están llamando a votar SÍ en el plebiscito. Según la pregunta del plebiscito, se está llamando a apoyar esos acuerdos en concreto, que también son muy importantes para el gobierno porque complementan sus planes económicos, políticos y militares. Autor: Partido Socialista de los Trabajadores, 2 de septiembre de 2016. Ahora viene el plebiscito, que será en la práctica una especie de consulta, pues el que se pierda no significa que los acuerdos de La Habana ya no tengan valor y que se vuelve a la guerra. Los comandantes de las Farc ya lo han aclarado, no volverán a la guerra. Si Santos dice lo contrario es para asustar y presionar para que se vote por el SÍ. De ganar el Sí será un apoyo político a Santos, si gana el NO un apoyo político a Uribe. Dentro de la democracia burguesa el plebiscito es el mecanismo más antidemocrático porque solo permite que se responda sí o no. Es la razón por la cual es utilizado por las dictaduras. La izquierda que está llamando a votar por el SÍ tiene ese problema, pues aunque algunos no compartan aspectos importantes de los acuerdos firmados entre las Farc y el gobierno, al votar por el sí termina cayendo en la trampa de apoyar el conjunto del contenido de los acuerdos. Sólo un ejemplo, al tiempo que el acuerdo incluye la amnistía para los guerrilleros, como contraparte, perdona a los militares, a los parapolíticos y a los empresarios, terratenientes y ganaderos que participaron en masacres contra la población civil y los trabajadores. De otra parte, en los acuerdos hay muchas promesas que no se cumplirán porque el gobierno, la burguesía y el imperialismo, que ha estado detrás de todo el proceso de paz, tienen otros proyectos como la Ley Zidres y la reforma tributaria, que son fundamentales en sus planes. Mientras el gobierno llama a votar por el SÍ, está preparando la contrarreforma tributaria para presentarla al congreso al día siguiente de la votación del plebiscito. Una contrarreforma cuya esencia es aumentar el IVA y los impuestos de los pobres y reducir los impuestos a los ricos. La salud seguirá empeorando como servicio y derecho de los pobres y seguirá siendo cada vez mejor negocio para los empresarios. Lo mismo sucederá con la educación y la vivienda, y los demás derechos y servicios. Estamos porque se acabe el conflicto armado entre la guerrilla y el aparato militar del Estado, y por garantías para participación en política de las Farc, al tiempo que exigimos que sea extensiva a las demás organizaciones de izquierda, pero eso no implica que debamos apoyar acuerdos en los que población no cuenta. Por el contrario, el gobierno utilizará un resultado favorable en el plebiscito para aplicar con más popularidad los agresivos planes contra los trabajadores y la población pobre. Tampoco llamamos a votar por el NO de Uribe, porque es darle apoyo político al uribismo, que rechaza los acuerdos por razones opuestas a las que, sostenemos los socialistas. Uribe quiere más impunidad para su sector y se empecina en que a la insurgencia no se le den garantías y participación en política. Su rechazo es porque no tendrá la suficiente participación en los negocios del posconflicto. Por considerar que el mecanismo del plebiscito es antidemocrático lo rechazamos, pero al mismo tiempo llamamos a movilizarnos para conquistar la convocatoria de una Asamblea Constituyente amplia, libre democrática y soberana. Una Constituyente que esté al servicio de los de abajo, de los trabajadores y la población pobre y desposeída de derechos. Recurrimos al más democrático de los mecanismos de la recortada y limitada democracia burguesa: la Constituyente. Por lo anterior llamamos a que el 2 de octubre vayamos a las urnas y escribamos sobre el SÍ y el NO: Constituyente. Post Views: 3.311