Colombia, Declaraciones Primero de mayo: No conseguiremos en el congreso lo que no logremos en las calles Publicado por: Editor Central el 29 abril, 2025 Más en Colombia: Carolina Garzón: 13 años de su desaparición 28 abril, 2025 Entramado de corrupción en Fomag y Fiduprevisora 24 abril, 2025 La consulta popular debe ser con un paro nacional 22 abril, 2025 Desde mediados de marzo asistimos a la reactivación de la movilización de los trabajadores y sectores populares, a raíz del rechazo en el Congreso de la nueva reforma laboral del gobierno y del inminente rechazo, ya anunciado por los principales partidos de la burguesía, a la segunda versión de su reforma a la salud. La gran participación en estas movilizaciones es una muestra del repudio de las masas al Congreso, como una institución estatal corrupta al servicio de los empresarios y ricos del país y de espaldas al pueblo, en la que no se logran conseguir ni siquiera las recortadas reformas del gobierno que buscan paliar las precarias condiciones laborales y sanitarias, y mucho menos tienen solución los grandes problemas que aquejan a los millones de trabajadores y pobladores empobrecidos de las ciudades y el campo, como el alto costo de la canasta básica, los excesivos cobros en los servicios públicos, la tercerización laboral y la proliferación de los contratos basura (trabajo por OPS), entre otros. Las movilizaciones también reflejan que el descontento social, cuya máxima expresión fueron los paros de 2019 y 2021, no se ha logrado desmontar, a pesar del apaciguamiento al que lo han llevado las direcciones mayoritarias del movimiento obrero y popular con su política de confianza en las instituciones “democráticas” del Estado burgués y de apoyo acrítico al gobierno de Petro, abandonando la lucha directa en las calles como método para alcanzar las reivindicaciones más apremiantes. Las jornadas del 18 y 31 de marzo de este año marcan el camino que los trabajadores y sectores populares debemos darle a la movilización, a través de la lucha directa en las calles, aunque nuevamente las direcciones reformistas y progresistas pretendan llevarlo al camino sin salida de la democracia burguesa, esta vez con la propuesta de consulta popular, una alternativa aparentemente de poder popular, pero que en definitiva vuelve a dejar en manos del Congreso la suerte final de las reformas. Además, también es un hecho que las fuerzas políticas aglutinadas en el Pacto Histórico buscan agitar la movilización solo como instrumento al servicio de la campaña electoral al Congreso y la Presidencia en el 2026. Agresión contra Palestina y Ucrania, y guerra comercial interimperialista En el plano internacional, Netanyahu ha roto el frágil alto al fuego acordado con Hamas y ha reanudado sus bombardeos indiscriminados y ataques a mansalva contra la población inerme en la franja de Gaza, de los que no se han salvado ni los cuerpos de socorro de la Media Luna Roja y la ONU. Esta continuación del genocidio contra el pueblo palestino por parte de Israel cuenta con el total respaldo de EE. UU. que cínicamente ha expresado su intención de expulsar a los palestinos de Gaza para construir un gran resort turístico en ese territorio. Entre tanto, en un sorprendente viraje de la política de EE. UU. frente a la guerra en Ucrania, Trump y Putin parecen haber llegado a acuerdos para poner fin a la guerra en los que Rusia se anexionaría los territorios invadidos y EE. UU. se apoderaría, a título de compensación por la supuesta ayuda de guerra prestada a Ucrania, de importantes recursos del país como los yacimientos de minerales de tierras raras, y todo esto con la obsecuencia del lacayo gobierno de Zelenski. Ninguna paz justa para los pueblos de Palestina y Ucrania vendrá de la mano del imperialismo que solo busca saquear sus recursos y apoderarse de sus territorios sojuzgándolos por la fuerza. De otra parte, el presidente de los EE. UU., Donald Trump, aprobó recientemente la imposición de unos exorbitantes aranceles comerciales a los productos de todos los países del mundo que entran al mercado estadounidense. Esto hace parte de su política de ultraderecha que, pese al populismo con el que la adorna para ilusionar a las bases sociales que lo eligieron, solo busca salvaguardar los intereses del decadente imperialismo yanqui frente a la crisis crónica de la economía mundial y a su actual puja con el emergente imperialismo chino. La supuesta fórmula en la cual se basan estos aranceles carece de todo rigor económico, ya que equipara el déficit de EE. UU. en la balanza comercial con una supuesta “deuda comercial” de cada país importador. Prueba de que esta también es una táctica más en su guerra comercial con China es que el mayor incremento arancelario se da a ese país y a la mayoría de los países de Asia que comercian con él o son sus principales semicolonias, como Vietnam. Sin embargo, además de afectar a los otros países, esta medida también encarecerá los productos y con ello el costo de vida en el propio EE. UU., afectando directamente el bolsillo de los trabajadores y las clases medias que terminarán pagando la recuperación del “esplendor de América”, un vil subterfugio de Trump para referirse a la preservación de la hegemonía mundial de los grandes monopolios estadounidenses. Pero en el mismo EE. UU. ya se empieza a expresar el rechazo a Trump y a sus políticas, con las multitudinarias movilizaciones el 5 de abril en todo el país, en las que se vislumbra que los trabajadores y sectores populares no se quedaran inmóviles ante tanto atropello. Ante este panorama nacional e internacional, este Primero de Mayo, día internacional de la clase obrera, llamamos a los trabajadores, campesinos, indígenas, juventud y demás sectores populares en el país, a movilizarnos masivamente contra el Congreso y la burguesía que hoy se oponen abiertamente a realizar cambios en beneficio de los oprimidos, como preámbulo a la preparación y organización de un Encuentro Nacional Obrero y Popular que vote el Paro Nacional para materializar los cambios radicales que en verdad se necesitan; contra el imperialismo y sus planes de saqueo de los recursos de Ucrania y de exterminio del pueblo palestino para la colonización total de su territorio por parte del sionismo; en solidaridad con la resistencia palestina y la ucraniana, exigiendo al gobierno de Petro la ruptura de relaciones comerciales, militares y de todo tipo con Israel, así como el apoyo material a la resistencia, incluyendo armas, para que logre salir victoriosa. Comité Ejecutivo PST, abril de 2025 Post Views: 28